Murcia, ¡qué hermosa eres!
La ciudad española de Murcia, situada al sudeste de la Península Ibérica y capital de la comunidad autónoma del mismo nombre, alberga en su patrimonio un sinfín de testimonios que la convierten en punto de encuentro entre la tradición y la modernidad.
Murcia fue fundada en el año 831 en el centro del Valle del Río Segura, durante el dominio musulmán en la zona, y pronto adquirió gran importancia. Su importancia solo ha ido en aumento desde entonces y, actualmente, nos encontramos con una ciudad que no sólo es pasado, es presente y futuro. Una ciudad moderna con todos los equipamientos necesarios que, gracias a las buenas temperaturas que se mantienen todo el año, a su situación geográfica privilegiada y al carácter hospitalario de su gente, es un lugar excelente para disfrutar del ocio y del entretenimiento.
Numerosas son las fiestas anuales que se celebran en esta hermosa ciudad mediterránea, pero se han de destacar tres por su carácter excepcional: La Semana Santa, las Fiestas de Primavera y la Feria de Murcia.
La dimensión artística y espiritual de las procesiones de Semana Santa en Murcia convierten estas fiestas en una de las manifestaciones más interesantes e intensas del panorama español. Durante diez días, los nazarenos rememoran la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo mientras reparten caramelos y regalos. El incienso y el perfume de las flores de los pasos unido a las bocinas, los tambores y las cornetas que ponen ritmo a los estantes mientras desfilan, crean una experiencia única para los sentidos.
Y tras la Semana Santa llegan las Fiestas de Primavera. Dos actos fundamentales definen estas fiestas, el Bando de la Huerta, gran cabalgata en la que personas vestidas con trajes tradicionales reparten alimentos propios de la gastronomía de la región, como morcillas, longanizas, salchichas o habas y bebidas como vino o cerveza; y el Entierro de la Sardina, cuyo acto central es un gran desfile de carrozas que culmina con la quema de la sardina el sábado siguiente a la Semana Santa.
En Septiembre tiene lugar la Feria de Murcia. Su celebración se remonta al año 1266. Aunque en su origen tenía un carácter estrictamente comercial, en los últimos años el aspecto lúdico ha desbancado por completo al comercial. Durante su celebración, no se pueden dejar de visitar los Huertos del Malecón, con sus barracas para la degustación de los productos típicos de la huerta.
Pero Murcia, con sus gentes encantadoras y abiertas, con más horas de luz que cualquier otro lugar de España y con mil encantos por descubrir, no deja indiferente en ninguna época del año.
Fuente: murcia.es
